Tu sutileza me quiere separar
mi franqueza me acerca un poco más.
El paragüas de tu frágil inmanencia
me hace cada día más escéptica.
Los rayos de tu misterio lejos están
pero la luz no deja de alumbrar
todo aquello que algún día
intentaste desparramar.
Aquella fragancia
me rodea por de más
en este andar que parece un huracán
en plena ceguedad.
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Mi oído puede descansar
el calor se puede congelar
la actitud se puede rebelar
la esperanza se puede dispersar
pero la espera y mi mente
no dejarán de imaginar.
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Y TE ENTERRARÁS UN POQUITO MÁS
Y EMPEZARÁS A SOBRELLEVAR
AQUELLO QUE DE A POCO TE EMPIEZA A DESTROZAR.
...si dejas de imaginar
ResponderEliminarla mente dejará de ser
el sol dejará de amanecer
la brisa dejará de soplar
y la luz dejará de alumbrar...
Sigue imaginando siempre.
Besos